En veterinaria, son cirugías donde se fractura el hueso sano, intencionadamente, en el quirófano, con la finalidad de que el perro vuelva a apoyar.
Son técnicas que funcionan en cuánto al apoyo pero, modifican la anatomía de la rodilla original, y no mantienen todos los movimientos naturales del perro con posibles consecuencias irreversibles en las rodillas.
La técnica Evolig mantiene la anatomía de la rodilla y remplaza solo el ligamento fracturado para recuperar la funcionalidad y biodinámica natural igual que en humana.